El pasado jueves la compañía Tesla presentaba un producto destinado, literalmente, a revlucionar el sector energético: Tesla Energy, una batería para el hogar que con un precio de entre 3000 y 3500 dólares será capaz de crear un ecosistema de energía limpia desterrando para siempre los combustibles fósiles (finitos y contaminantes) y permitiendo la independencia de las compañías energéticas. Los beneficios para el mundo y para las personas son evidentes; el perjuicio para las compañías de energía, también lo es. La batalla energética, ahora más que nunca, está servida.
Tesla Energy, un doble beneficio social y para el mundo
Hace 130 años Nikola Tesla (1856-1943) tuvo un sueño: crear un conjunto de baterías "que fomenten un ecosistema de energía limpia y ayuden a destetar el mundo de los combustibles fósiles". El pasado jueves, Elon Musk puso voz al sueño de Nikola Tesla anunciando que ésto ya era una realidad y se llamaba Tesla Energy.
Con esta batería Tesla Energy la compañía ha dado un paso de gigantes en dos aspectos esenticiales. De un lado, el abaratamiento de la energía. De otro, y no menos importante, la cuidado del medio ambiente.
Estas baterías tendrán un coste de 3000 o 3500 dólares dependiendo de su potencia (7kwh y 10kwh respectivamente), serán fabricadas, por el momento, en mi misma fábrica de Tesla Motors (aunque ya se está construyendo la primera fábrica exclusiva para este producto en Nevada). Comenzarán a ser distribuidas a los primeros interesados en agosto de este mismo año y, en 2016, comenzará su reparto por el mundo.
De momento sólo existirá Tesla Energy para los hogares aunque, sin aportar detalle alguno, han prometido que también habrá versiones para empresas y servicios públicos.
Tesla Energy es un paso crucial hacia conseguir emisiones cero en la generación de electricidad (…) Tenemos a nuestra disposición a este reactor de fusión en el cielo, llamado Sol, que servirá para acabar con la adicción del mundo al combustible fósil y con las emisiones de CO2.
¿Qué es Tesla Energy?
Tesla Energy no es otra cosa que una batería de iones de litio (sí, algo así como la batería del móvil que ahora tienes sobre la mesa, o en el bolsillo o la tablet donde estás leyendo este post). Esta batería se cargará de energía solar e incorporará un software que será el encargado de dar las órdenes para suministrar energía.
Con un tamaño de 1300×860 mm y disponibles en tres colores, serán fácilmente instalables en el hogar armonizadas con su entorno.
Además, se podrán integrar en redes locales para aprovechar el exceso de potencia.
Con 160 millones de Tesla Energy todo Estados Unidos podría pasarse a la energía limpia y renovable; con 2000 millones de Tesla Energy, el sistema energético mundial dejaría de emitir CO2 a la atmósfera. ¿Puede entonces alguien poner inconvenientes?
Tal vez la cuestión no sea si alguien puede poner impedimentos a la Tesla Energy, más bien ¿alguien lo duda? Con gobiernos que instauran "impuestos al sol", petroleras ansiosas de prospecciones en el Ártico, en Canarias y allá donde se huela "oro negro" y con compañías hidroeléctricas que se verían sumidas en la ruina después de décadas de abusos e insensibilidad social (la PowerWall de Tesla, es su nombre comercial, supondrá un ahorro de hasta el 50% de la factura de la luz), como decía al comienzo, la guerra de la energía no ha hecho sino comenzar pero Tesla parece haber ganado la primera batalla.
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