" Una mujer desnuda y en lo oscuro" plantea un ameno, emotivo y, en ocasiones, divertido, trayecto al propio viaje físico y sentimental, de Benedetti durante sus diez años de exilio, a la vez que pone en escena la obra de uno de los poetas que más y mejor ha sabido hablar sobre el amor.
Mario Hernández se pone al frente de la dramaturgia y la dirección de esta obra basada en los maravillosos textos de Mario Benedetti que serán interpretados por Emilio Linder y Esther Vega,
Un recorrido personal por la memoria del exilio de Mario Benedetti, uno de los más grandes poetas hispanoamericanos de todos los tiempos, a través de sus recuerdos y sus palabras, y por supuesto, de sus poemas, no sólo aquellos que ya pertenecen a nuestra biografía sentimental, sino también aquellos menos conocidos, los más críticos, desgarrados, combativos, y humanos, del poeta uruguayo.
En 1973, tiene lugar en Uruguay un golpe de estado que obliga a Mario Benedetti a partir al exilio. Tiene cincuenta y tres años. El exilio durará diez años, diez años alejado de su gran amor, Luz López Alegre, con quien lleva casado desde los veintiocho. En ese tiempo, Benedetti viaja por todo el mundo, de Buenos Aires a Perú, Madrid, Cuba, Mallorca… Viaja denunciando la situación de su país, a voz viva y también en sus escritos, compartiendo la soledad del exiliado, su continuo viaje a ninguna parte y a todas partes. Excepto a casa.
Una mujer desnuda y en lo oscuro plantea un ameno, emotivo y, en ocasiones, divertido, trayecto al propio viaje, físico y sentimental, de Benedetti durante esos diez años, a la vez que pone en escena a uno de los poetas que más y mejor ha sabido hablar sobre el amor, y sobre los distintos tipos de amor: el pasional, el eterno, el erótico, el que dura siglos en la mirada de un segundo… El amor en todas sus formas y maravillosas, inagotables, posibilidades.
Una escenografía sencilla e ilustrativa, basada en maletas antiguas de viaje, en las que cientos de personas como Benedetti debían guardar toda su vida. Maletas en las que, todavía hoy, hay gente que debe confinar todos sus recuerdos y proyectos. Dos actores en escena. Emilio Linder es Mario Benedetti la noche antes de que termine la década de su exilio, y de sus recuerdos y su voz nos dejamos llevar a sus viajes, anécdotas, y poemas, y por supuesto, a las mujeres conocidas y amadas, todo ello la auténtica esencia del alma del poeta, que cobra aquí vida en esa mujer desnuda y en lo oscuro, encarnada por Esther Vega, trasunto del propio poeta.